Hay una España sin banda ancha para ver Netflix. Una España sin cines, sin AVE, sin apenas niños y de la que el resto del país solo se acuerda en vacaciones. Esta España, conocida por muchos con la paradójica expresión de “España vacía”, guarda en realidad gente. Dispersa, envejecida, pero tan real como la de cualquier gran ciudad.
La despoblación es una auténtica cicatriz que hace más profunda la brecha entre lo urbano, una zona localizada en la capital y la periferia de la costa; y lo rural. Dos realidades de país que crean una situación de profunda desigualdad y que generan un desarrollo brutal pero insostenible. Muchos ya saben de este mal y se han arremangado para ponerle freno.
En los últimos meses la agenda política y social ha sido la encargada de dar voz a una revolución silenciosa. Un movimiento de los que viven entre la esperanza del cambio y la nostalgia del pasado: una necesaria evolución imbatible que se convierte en realidad un punto de partida.
Desde las Instituciones ya se ha comenzado a generar foros de debate para ahondar en toda las problemáticas ligadas al desafío demográfico y analizar posibles medidas de carácter público y privado. Ejemplo de ello, el reciente Congreso Nacional, que llegaba esta semana a Aguilar de Campoo en su tercera edición de la mano de la Diputación de Palencia y la Federación Española de Municipios y Provincias.
En él se no solo se han buscado soluciones eficaces para dotar a los territorios de medios, infraestructuras y políticas que garanticen a los residentes sus derechos a los servicios en igualdad de oportunidades; para contrarrestar un proceso de componentes complejos y múltiples repercusiones, tanto en el presente como en el futuro.
Además, algunas instituciones como la Diputación de Palencia ya se han puesto manos a la obra y tienen sobre la mesa proyectos concretos, ideas para combatir la despoblación en el medio rural y todo ello a través de la incorporación de las nuevas tecnologías.
Este proyecto, denominado MercaRur@l Palentino, busca que los comercios rurales distribuyan de una manera ordenada y cercana los productos de abastecimiento de carácter cotidiano a los habitantes de la provincia de Palencia. Una idea, de momento solo eso, que ya ha sido premiada por su carácter innovador y que se ha traído bajo el brazo el galardón del I Concurso de Ideas para generar soluciones tecnológicas para el Comercio Minorista de la FEMP.
Como miembro presente en la Red de Agentes de Comercio Interior (RACI) la Diputación Provincial pretende precisamente impulsar la ordenación, la innovación y la promoción del comercio local. Y que dentro de los diferentes esfuerzos que se están llevando a cabo en materia de comercio se ha realizado el Diagnóstico del Abastecimiento Comercial de Producto Cotidiano en el Medio Rural de la provincia de Palencia. Es aquí donde surge esta innovadora idea; al hilo de las carencias y necesidades recogidas en el Plan Estratégico 2020 de la Provincia de Palencia, y de este Diagnóstico que mencionamos; ambos elaborados por el Servicio de Promoción Económica y Empleo de la Institución.
Con la puesta en marcha de Mercarural se buscan dos cosas: por un lado, incrementar el volumen de negocio de los comercios minoristas del medio rural palentino, y por otro, acercar productos de abastecimiento de carácter cotidiano a la población del medio rural. Redundando todo ello en contribuir a fijar y mantener la población local a través de la prestación de servicios a la que contribuye el comercio on-line.
A través del diseño y el desarrollo de una aplicación móvil que sirva como plataforma de compra, el proyecto busca dar facilidades a las familias palentinas en sus compras, en especial en aquellos pueblos en los que el comercio no existe. Todo esto a través de un sistema de interconexión bidireccional comerciante- cliente. Es decir, los establecimientos participes del proyecto posicionaran su productos en la plataforma comercial a la que podrán acceder los clientes, tanto a través de un ordenador personal como de aplicaciones para dispositivos móviles como son los teléfonos inteligentes y las tabletas. Se trata, en definitiva, de que puedan encargar su compra semanal y establecer el día y hora de recepción de la misma en su municipio.
Desde la Diputación de Palencia se ha apostado por que la sencillez y la usabilidad de este sistema, tanto para la población local como para los comerciantes; para lo cual se ha diseñado una serie de acciones formativas con el objetivo de lograr un grado óptimo de alfabetización digital.
Una mirada a la alfabetización digital. Mercarural Palentino pretende fundamentalmente eso, facilitar que los familiares o cuidadores de las personas mayores y/ o con discapacidad y que no tengan competencias digitales, puedan realizar la compra en los establecimientos comerciales asignados a la residencia habitual de aquellos. Creándose, en este sentido, la figura del “familiar y/o personal autorizado” para la realización de la compra habitual.
Tampoco podemos olvidar que aunque serán directamente los comerciantes quienes gestionen productos y distribución, serán evaluados continuamente: el procedimiento, el proceso de compra y el nivel de satisfacción de usuarios y comerciantes. Buscando la satisfacción del cliente, que en este caso no es otro que el habitante del medio rural palentino.
Sin duda alguna es hora de proponer soluciones, soluciones como estas, que se apoyen en la innovación, en las nuevas tecnologías pero también en lo que tenemos: nuestras empresas, las de siempre y nuestros vecinos; siempre dispuestos a luchar por lo que más quieren: su pueblo.